Se trata de grandes recipientes de roble donde el vino puede estar durante más de 5, 10 o 15 años en evolución. Su madera es más gruesa que la de una barrica y de allí que sean reutilizados, en la Argentina tenemos toneles de 1930 que siguen en uso en bodegas del país.
A diferencia de la barrica, el tonel tiene una mayor proporción de vino en relación con la madera y, en consecuencia, su uso no tiene q ver con aportar sólo aromas y sabores sino también con favorecer el proceso de evolución de un vino pensado para tal fin.
¿Conocías estos recipientes? ¿Qué más te gustaría saber? Te leo 🤓
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