Hay muchas dudas sobre el origen de esta variedad, se dice que proviene de Medio Oriente de la zona de Shiraz, ciudad de la antigua Persia, pero otros aseguran que llegó a Siracusa en Sicilia de la mano de las legiones del emperador romano Probo en algún momento posterior al 280 d. C.
Lo que si sabemos es que es un cruce de la dureza y la mondeuse blanche, dos uvas tintas del sureste de Francia, y que es llamada de muchas formas: syrah, shiraz, balsamina, candive, schiras, sirac, syra, ryrac, serine y sereine, entre otros.
La syrah se hizo famosa por los vinos Hermitage, una colina con una ermita en la cima en la ciudad Tain-l'Hermitage, en el norte del Ródano (te recomiendo que conozcas la historia del ermitaño que le da su nombre)
En Argentina tenemos unas 11.915 hectáreas de este varietal, es decir, aproximadamente un 10% del total de las variedades tintas. En esta superficie se encuentran los viñedos de la Bodega Fabre Montmayou que nace en 1993 bajo el impulso de Hervé Joyaux Fabre, propietario y enólogo de la bodega e integrante de una familia de comerciantes de vino de Burdeos.
Hoy les comparto este Syrah 2016 de Luján de Cuyo con un buqué complejo y elegante, casi un perfume de frutas silvestres y flores.
Y a vos ¿Te gusta el Syrah? ¿Cuál recomendás?
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